TACO se llama el programa del Hospital del Salvador que otorga tratamiento a quienes necesitan de medicamentos anticoagulantes. Desde 2010 que se est entregando en centros de Lo Barnechea, PeÂalolÂn y La Reina, favoreciendo a 937 personas que ya no deben realizar grandes traslados para acceder a esta terapia.
Tres mil pacientes reciben terapia anticoagulante en el Hospital del Salvador. Personas que han sufrido de una enfermedad tromboembÂlica, es decir, que en alguna de sus venas se form un coÂgulo que al desprenderse termin por obstruir el flujo de sangre hacia algÂn Ârgano vital, provocando, por ejemplo, un accidente cerebrovascular o un infarto cardiaco.
Se trata del programa TACO (Tratamiento Anticoagulante Oral), que a travÂs de medicamentos prescritos bajo un estricto esquema terapÂutico ayuda a evitar que el paciente pueda sufrir nuevamente de una tromboembolia. Actualmente, esta iniciativa est consolidando un proceso de descentralizaciÂn, que ya la tiene funcionando en centros de salud de Lo Barnechea, PeÂalolÂn y La Reina. Como idea, fue desarrollada por el Laboratorio de CoagulaciÂn de la SubdirecciÂn de Apoyo, DiagnÂstico y TerapÂutico del Hospital del Salvador e impulsada por el Departamento de GestiÂn y CoordinaciÂn de la Red del SSMO (DEGCOR).
ÂPartimos en 2009 con la idea y en 2010 la comenzamos a implementar en Lo BarnecheaÂ, explica MÂnica Arismendi, quien trabaja en la coordinaciÂn de Laboratorios y es asesora del DEGCOR). ÂDespuÂs se sum el Centro de Referencia en Salud Cordillera, de PeÂalolÂn y mÂs tarde dos Cesfam de La ReinaÂ, aÂade.
A estos centros se les entreg el aparato INRatio, que es el que a travÂs de una muestra de gotas de sangre mide el tiempo de protrombina (lo que demora el plasma, que es la porciÂn lÂquida de la sangre, en coagularse). Quien toma esa muestra envÂa esos datos al Laboratorio de CoagulaciÂn del HDS, a travÂs de un programa computacional diseÂado para eso.
Esos antecedentes son revisados por una cardiÂloga que elabora los esquemas terapÂuticos para cada paciente. AhÂ, especifica la dosis exacta diaria de medicamento que la persona debe tomar con un dibujo de una pastilla dividida en cuatro partes.
Luego, envÂa esa prescripciÂn a los respectivos Cesfam o al CRS, donde son retirados el mismo dÂa del examen por los pacientes, quienes tambiÂn recogen los medicamentos que les fueron recetados.
MÂs cerca
Un tercio de quienes reciben este tratamiento (937 pacientes) son habitantes de esas comunas que hoy agradecen no tener que movilizarse hasta el HDS (en avenida Salvador, Providencia), para controlar su estado de coagulaciÂn y recibir su tratamiento. Sobre todo porque si bien muchos sÂlo tienen que ir una vez al mes a medir este Ândice, otros deben pasar una y hasta dos veces por semana por este control
Rosa Vera Espinoza, de 70 aÂos, va una vez al mes a consulta. Desde 2007 que ella recibe este tratamiento luego de sufrir un trombo y desde 2010 que concurre al Cesfam Lo Barnechea, comuna donde ella vive, para controlar su tiempo de protrombina y recibir el fÂrmaco que la ayuda a evitar la formaciÂn de coÂgulos.
ÂNo tener que ir al Salvador es mucho mejor para mÂ, porque me costaba mucho llegar allÂ. Estoy a menos de 10 minutos en micro de aquÂ, mientras que para ir al hospital tenÂamos que salir antes de las seis de la maÂana de la casa y esperar el resultado hasta la una de la tardeÂ, comenta, mientras le pinchan un dedo para tomar las gotas de sangre que le permitirÂn saber, en escasos minutos, qu tal est su nivel de coagulaciÂn sanguÂnea.
Ella se va tranquila, porque sus Ândices estÂn dentro de lo normal. MÂs tarde, su esposo ir a buscar el esquema (que detalla dÂa a dÂa qu dosis de anticoagulante debe tomar), porque ella usa una muleta y le cuesta desplazarse.
Muy similar es el caso de Elisia VelÂsquez, de 73 aÂos. Ella sufre de taquicardia, lo que la tuvo, hace seis aÂos, hospitalizada durante casi un mes en el HDS. ÂLa taquicardia siempre me est fregandoÂ, dice, Âes una enfermedad que una tiene y hay que saber vivir con ellaÂ. Una vez al mes acude al Cesfam Lo Barnechea a controlarse y buscar sus medicamentos, Âlo que es mucho mejor que como era antes, cuando partÂamos a las seis de la maÂana al Salvador y nos atendÂan a las ocho y mediaÂ.
Soledad Andrade, tecnÂlogo mÂdico del laboratorio del Cesfam Lo Barnechea, comenta que en promedio diariamente acuden ocho pacientes a controlar sus Ândices. ÂSe les hace el test y si este sale por encima o bajo el rango establecido les preguntamos si estÂn tomando algÂn tipo de medicamento o si se saltaron una dosis. Eso lo informamos cuando enviamos los datos al Salvador y les decimos a los pacientes que deben ir al hospital para que los estabilicenÂ, explica la profesional.
TambiÂn son derivados al hospital aquellos que se saltan un control, lo que no les hace ninguna gracia. ÂEllos tienen que ser bien ordenados tanto con los controles como con su medicamento. Deben tomarlo de preferencia en la tarde, alejado dos horas de las comidasÂ, concluye Soledad Andrade.