En el mes de mayo, todos los monumentos nacionales abren sus puertas a la ciudadanía. Este domingo 25 de mayo, el Hospital del Salvador recibió a la comunidad, que recorrió la capilla, declarada monumento nacional en 1985, y los pasillos centrales, que contaron con una muestra fotográfica del ayer y hoy de sus dependencias y una degustación gastronómica de la cosmovisión mapuche.
La actividad estuvo encabezada por el Director del Servicio de Salud Oriente, Dr. Hernán Olguín, y el director del Hospital del Salvador, Dr. Carlos Altamirano. En la oportunidad, ambos facultativos agradecieron la presencia de la comunidad externa e interna, haciendo hincapié en la importancia del rescate de la historia de los centros de salud.
Para el dueño de casa, Dr. Carlos Altamirano, “valoramos enormemente la presencia de ustedes en el día del patrimonio, donde nuestro Hospital del Salvador, que ya tiene más de 140 años, funciona gracias al gran equipo humano que posee, y aprovecho de agradecer el importante trabajo en torno a estos años que hace el voluntariado con nuestros pacientes; vayan para ustedes todo mi reconocimiento.”
El acto artístico-cultural estuvo animado por un grupo folklórico de cueca brava y la destacada participación de José Luis Seves del grupo Inti-Illimani, quien interpretó bellas melodías.
Además, alumnos de teatro de la Escuela del Uniacc acompañaron entregando alegría, globos, magnetos con la fachada del hospital e información sobre la capilla del Hospital, declarada monumento nacional en 1985.
En el trayecto hacia la capilla, una interesante muestra fotográfica acompañó a los asistentes. En esta recopilación de imágenes se pudo apreciar el antes y el ahora de algunas dependencias del recinto hospitalario. La actividad estuvo organizada por el Servicio de Salud Metropolitano Oriente y contó con la colaboración del Hospital del Salvador.
Capilla Hospital del Salvador: Nuestro Patrimonio
La Capilla del Hospital del Salvador es considerada una belleza arquitectónica, no solo por la antigüedad de la construcción que data del año 1903, sino también por sus vitrales franceses y su órgano de tubo, además de su reconocida cúpula que sobresale en el frontis.
Así como la fachada principal del Hospital del Salvador, su núcleo central, sus respectivos patios y la Capilla, declarados Patrimonio Cultural, son parte importante de la historia de esta destacada institución de salud que atiende a personas provenientes del área oriente y de todo el país. Sin embargo, la cúpula, parte fundamental de la Capilla, fue severamente dañada por el terremoto que afectó al país el 27 de febrero de 2010.
El diseño de la capilla corresponde a una monja arquitecta de la Congregación de las Hijas de la Caridad, y concentra toda su decoración a baja altura, lo que permite una visión cómoda y directa de sus valiosos vitrales; hacia arriba, la gran cúpula, muy proporcionada, aparece pura y limpia de todo ornamento y sobresale majestuosamente, dándole un sello muy particular.
El primer claustro tiene en tres de sus lados corredores formados por una arquería de medio punto que arranca de columnas talladas en piedra, de fuste circular de una sola pieza y capitel de orden compuesto. El segundo claustro de dos pisos pertenece a la comunidad religiosa Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paúl. En el primer piso se repite la arquería del primer claustro, esta vez sobre grandes machones cuadrados de ladrillos. En el segundo piso los corredores forman una galería vidriada.
El Hospital del Salvador es un valioso exponente de una arquitectura hospitalaria característica del siglo pasado, tanto por su esquema planimétrico como por la calidad de algunas soluciones espaciales y constructivas del sector central, en torno a la capilla y a los patios que lo rodean.